LAWCARP

Bienvenidos a mi rincón del carpfishing, lugar de rebeldia que tiene como destino mostrar la desconexión absoluta del mundo real. Integrados en la naturaleza de la que formamos parte ( hoy en día parece que nadie se acuerda) reivindico mediante el carpfishing mi lugar en ella. Porque las carpas no mienten ni hacen trampa, no pueden ser sobornadas con el dinero ni impresionadas con el poder y responden únicamente a la humildad, la quietud y la infinita paciencia.







martes, 26 de julio de 2011

DIARIO DE UN CARPÓN


Mi nombre es Robert, soy un viejo carpón que reside en aguas francesas, más concretamente en la localidad de La Collancelle, en aguas del lago Gouffier, en la zona interior de francia.

Tengo mucos años de vida, años de experiencia en los que me han capturado pocas veces a pesar de la masificación de pesca que sufre mi lago. Aquí vienen carpistas de toda Europa, alemanes, italianos, ingleses, españoles  y como no, franceses. La vida aquí resulta tranquila, no nos falta comida, reina la paz y la tranquilidad y vivimos en una sociedad sin normas ni leyes, algo que no necesitamos.


Son muchas las experiencias vividas, pero me gustaría hablar de una en concreto que me sucedió hace dos semanas. Un grupo de españoles vino al lago a pasar dos semanas de pesca, en pocas horas me percaté de que se trataba de un círculo de amigos algo peculiar; Entre ellos pude diferenciar un economista, un Magistrado, un sociólogo y un político. La verdad es que les debo mucho, pues me puse al día de los problemas actuales en su país.
Allí no está permitida la pesca nocturna, aunque actualmente están dando pasos de gigante en el asunto y algo se está consiguiendo, pero me parece algo chapucero, descontrolado y sin futuro, pues resulta insuficiente a todas luces, algo que ni se parece al orden, control, seguridad y facilidades que se ofrecen aquí en mi lago. Las administraciones no tienen tiempo de ocuparse de aficiones tan concretas, y menos con la crisis económica y social que tienen en España en estos momentos.

Resulta triste y oscuro, triste porque no se si esos pescadores que vinieron al lago podrán ver con sus propios ojos la privatización del carpfishing en su país, quizás sus hijos o sus nietos, yo espero vivir para poder enterarme. Oscuro porque resulta complicado que con la actual normativa de pesca y crisis económica, alguien se aventure a solicitar a la Administración concesiones de lagos para gestionarlos, haga un estudio profundo de todas las condiciones y características  y finalmente se decante por una inversión económica con peso, en donde apostará su futuro profesional con el consecuente riesgo.

Políticamente están sin esperanza alguna. Actualmente y según contó el sociólogo, el cual entró en debate con  su Ilustrísima, están saliendo del mayor cáncer político de la democracia Española, una enfermedad que ha dejado a su país en la miseria y de la que tardará años en salir. Ese Zapaterísmo parece ser que finalmente, más que percatarse se ha retirado por haber agotado todas las posibilidades y lo peor de todo, ninguna con éxito. Como el fausto de Christopher Marlowe aprendió de mala manera, desear que un momento de dicha permanezca “igual” de forma indefinida, es una garantía para convertirlo en un camino hacia el infierno en vez de hacia una felicidad sin fin.

La solución a tales problemas parece no existir, pues el futuro político de su país se sustenta en otro brazo opuesto, con pelo canoso bajo un tinte oscuro y llamativo. Una balanza opuesta que se apoya en la eterna crítica, sin aportar solución alguna, que sencillamente partirá desde cero, intentando levantar un templo ya maldito, cancerígeno y que no tiene fin ni solución, pues el ladrillo se acabó.

En mi lago no existen tales problemas, pero sinceramente pienso que se trata de un problema que reside en el “selft”. Aquí no tenemos leyes, ni economía ni política, nos basamos en la subsistencia que nos brinda la naturaleza. Nuestra convivencia es pura y los conflictos son escasos. Es cierto que al ser un lago intensivo de pesca y privatizado, no nos faltan boilies, pero creo que eso hay que agradecérselo a los carpistas, al ser humano. Si no fuese un ser tan codicioso, repleto de avaricia, altivo, soberbio, al que le corrompe el poder, la gloria y el dinero, dudo mucho que nos lloviesen tantos boilies al agua con el afán de capturarnos, lo cual son defectos que los carpones como yo, debemos agradecer.

El sociólogo me hizo descubrir la situación tan desastrosa que vivía su país, un sociólogo llamado Dacio Gil, un recién aficionado a la pesca de la carpa que había descubierto recientemente sus cualidades como pescador. Pero lo que verdaderamente le apasionaba, era el poder escapar durante unos días de esa sociedad tan corrupta e injusta, en donde el propio hombre gobierna para su propio interés, encontrando goce y disfrute en sus más íntimos defectos maquiavélicos.

El Magistrado continuó haciendo una disertación  de sus experiencias vividas, intentando justificar y alardear de su objetividad e imparcialidad, a la hora de juzgar y ejecutar lo juzgado. Yo como carpón no conseguiré comprender jamás tal situación, con ensañamiento y alevosía. ¿Cómo es posible una justicia veraz, honrada y pura hecha por el hombre, para el hombre y aplicada por el propio ser?. Resulta catastrófico, autodestructivo, una intención forjada por seres imperfectos en un mundo defectuoso, en donde se solventa todo en base al error.


Simplemente fueron unos días de pesca, en donde pude comprender la triste situación que vivían esos hombres en su país. Nosotros los ciprínidos no tenemos tantos problemas, nos dedicamos a gozar de una vida sosegada, disfrutando y sabiendo apreciar las pequeñas cosas de la vida. Y finalmente quizás deba agradecer ser carpa, pues nosotros los peces no nos dejamos sobornar por el dinero, ni impresionar por el poder ya que respondemos únicamente a la humildad, la quietud y la infinita paciencia.


Seguiré reflexionando más adelante sobre ese mundo en el que pretendéis sobrevivir,  y la próxima vez que reciba una visita interesante de carpistas como los citados, no dudaré en contarla….

Artículo realizado por: Eduardo Zancada


miércoles, 20 de julio de 2011

EN EL CAMBIO ESTÁ EL ÉXITO


Me gustaría compartir una anécdota que me ocurrió una vez en un conocido embalse madrileño, hoy cuna del carpfishing en Madrid y que tras aquella sesión me hizo reflexionar. Algunas veces, nos obsesionamos demasiado en nuestro puesto, aquel que hemos preparado a conciencia  y que una vez allí, las cosas no pintan tan bien como parecían, desistiendo de cambiar de cebo o técnica, dando como resultado final de la sesión, un bolo de escándalo y el haber perdido una gran parte de nuestro preciado y escaso tiempo libre.

Como decía anteriormente, me encontraba al amanecer a orillas del embalse del Vellón, justamente en la cola de Guadalix, el día anterior me había pasado ojeando durante varias horas fotos que tengo del embalse vacío, para así buscar un puesto bueno donde lanzar mis cebos y que en pocas horas me diera resultados positivos. El embalse se encontraba al noventa y cinco por ciento de su capacidad y la práctica totalidad de la recula estaba llena.
Mi puesto se encontraba cerca de cauce del río, donde tenía pensado interceptar alguna de las panzonas que en este embalse sabemos muchos que hay. Todo parecía perfecto, tiempo primaveral, no mucho calor, las carpas saltando por la zona, algunas empezando con el desove, etc., lo que muchos darían por un día de pesca asegurada.
Me dispuse a cebar antes de preparar las cañas, para ir atrayendo a las carpas, confiándolas y tenerlas listas para cuando lanzase mis cebos. Algunos micro pellet, algo de engodo, semillas y boilies, vamos, lo necesario para prepara un cebadero en condiciones. Monté las cañas, lancé  y a esperar con ilusión la ansiada picada.
Una hora, dos, tres, cuatro, las doce y media de la mañana y ni un miserable pip. En la orilla opuesta, se estaba realizando uno de los campeonatos para clasificarse en los selectivos de Madrid y alguno de mis amigos se encontraba en él, así que decidí hacerles una llamada para ver si la mala suerte también les acompaña como a mi. Tras unos saludos de rigor me dicen que llevan seis peces de mediano tamaño 4 a 6 kilos y es en ese momento cuando a uno se le infla la vena gorda de la cabeza y empieza a blasfemar y pensar, ¿que narices pasa?, ¿que estoy haciendo mal?, esta gente si y yo nada, pero si esta todo perfecto¡, el lugar, peces activos, será algún enganche, se habrá enredado el montaje, tortugas, cangrejos, dinosaurios… miles de cosas que se le pasa a uno por la cabeza que nos martirizan el día.
Y es señores en esos momentos, cuando las cosas no funcionan y donde uno tiene dos caminos. El primero, dejar las cosas como están y si la diosa fortuna nos recompensa nuestra paciencia con una carpa, que dios la tenga en su gloria. O empezar de cero dentro del puesto en el que estamos, analizar que posibilidades tenemos y corregir el error .O a las malas, recoger y cambiarnos de puesto.
En mi caso me quedé en el puesto y empecé a analizar el puesto y mi montaje.
PUESTO: Zona de poca profundidad, con carpas activas, estando toda la zona llena de plantas inundadas.

MONTAJE: Semifijo y boilie de calidad fondante.
POSIBLE ERROR: No encuentran el cebo, ya que se queda escondido entre las plantas.
Cambie el montaje y en vez de plomo, puse un feeder repleto de engodo de color amarillo, al que le había añadido un poco de dip concentrado para activar mas la zona donde se encontraba mi cebo y el montaje que elegiría fue un 360 con un fluoro pop up de Squid Octopus de la marca Dynamite Bait, con un gusanito de foam soluble para que este se posara suavemente sobre la vegetación sumergida.
Volví a lanzar y pasados  unos quince minutos, una de las cañas se arranco, VIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIPPPPIIIIIIIIIIPPPPP, por fin el corazón se acelera, sales corriendo hacia la caña como si de un plusmarquista te trataras y deseas que no se desclave ni se enganche. Tras una estupenda pelea logre ensalabrar una preciosa común de casi doce kilos, la primera de aquel precioso día, la siguieron otra común de diez, otra de ocho común y siete kilos y medio de royal según mi libro de apuntes, en el tengo anotadas todas mis sesiones de pesca hasta la fecha.
Por eso desde aquel día, cada vez que las cosas empiezan a complicarse, me decanto por el segundo camino, aunque cueste empezar de cero y dar al traste con lo que hemos planeado en casa los días anteriores. Simplemente cambiando una de las cañas fuera del cebadero, distinto cebo, quitándola del trípode y poniéndola en otro sitio etc…
Espero que estas líneas os sirvan de algo y que os deparen como a mi, un gran día de pesca.


Artículo realizado por: Miguel García Baez
                                                                              

viernes, 15 de julio de 2011

LOS GUERREROS DE AGUA DULCE


Si pudiera, escribiría todos los años un artículo dedicado a este tema tan concreto y delicado. Los cangrejos que habitan las aguas españolas son tan deseados como odiados, dependiendo de las fechas en las que nos encontremos, usándolos como cebo en fechas invernales o intentando evitarlos a toda costa en fechas calurosas con una variedad de artilugios y técnicas de cebado que en muchas ocasiones, son ineficaces ante las pinza de estos queridos animalitos. Pero no hay que olvidar, que no podemos ni vivir con ellos, ni sin ellos, ya que son consecuencia del desarrollo de grandes ejemplares de carpas y barbos en España.

Existe una variedad de  cebos para conseguir burlar la actividad de estos crustáceos, tanto naturales como artificiales. En este tema del que podría estar hablando unas cuantas horas, me centraré en los cebos y técnicas que mejores resultados me han aportado hasta ahora, suponiendo que tengamos una población alta de cangrejos en un embalse cualquiera.

-Las chufas “elemento indispensable”:

Según mis experiencias vividas contra estos ejércitos implacables de la noche, un tubérculo como la grandiosa chufa, es para mí un cebo natural que en pocas ocasiones suele ser atacado por los cangrejos. Primero por su dureza y después por su textura, dos cualidades que nos abren las puertas en un mundo complicado. Como todos bien sabéis, nos ofrecen ese efecto crunch, al ser trituradas por las carpas que mantendrá nuestro cebadero activo durante más tiempo y gracias a la defecación de éstas, serán distribuidas paulatinamente, un sin fin de partículas de chufa por la zona de acción.
 El único inconveniente que le veo a este pequeño tubérculo, es el hecho de que nos puede expandir más de lo deseado la zona de acción del carpista (por medio de la defecación citada), algo que suelo solucionar concentrando el cebado o intentando mantener los peces en el cebadero.  

-Semillas para el entretenimiento:

Puede que esta no sea una de las mejores soluciones para evitar que terminen los cangrejos con nuestro cebo de anzuelo, pero algo si que los retiene. Los cangrejos tienden a enganchar con sus pinzas la comida y retirarse (en algunas ocasiones) a zonas cercanas y tranquilas donde otros no les arrebaten la comida. Teniendo en cuenta este comportamiento egoísta o mejor dicho, de supervivencia, podremos incluir en nuestro cebadero semillas como maíz previamente remojado y menos cocido de lo normal que nos aportará distracción y un pequeño margen de tiempo gracias a la dureza que le hemos otorgado con ese reducido tiempo al hervirlo.
El cañamón es otra semilla que suelo mezclar para estos menesteres junto con el maíz, siendo pequeño, discreto y obligando así a tener que ser buscado para su posterior consumo.
Hasta el momento, tenemos un cebo natural para cebar y con el que podemos también  anzuelar (la chufa), y otro cebo de entretenimiento y retardo que es una mezcla de maíz (un poco duro) y cañamón.


-Bait-mess:

Podremos utilizar como remedio superficial y para un leve ataque de cangrejos, los bait-mess. Se trata de un remedio casero en el que podremos envolver en una malla resistente, boilies, semillas o pellets. Estas mallas podemos obtenerlas en el mercado de carpfishing o conseguirlas de forma casera, pero debo recordar que es un remedio que solo me ha dado buenos resultados ante ataques de baja intensidad por parte de estos crustáceos, siendo un remedio con un periodo de vida limitado ante un ataque feroz en un embalse con altas poblaciones de estos.

-Boilies: duros y gigantes:

 Recuerdo una sesión de pesca hace cosa de 5 años, fueron cinco días en el mítico embalse de Orellana, famoso por sus cangrejos y grandes carpas. Acudimos a la jornada de pesca con unos cuantos kilos generosos de cebado entre semillas, pellets y  boilies, ¿sinceramente? fue un desastre, los cangrejos no dejaban el boilie en paz, bajos destrozados y semillas aniquiladas en pocas horas. Aunque no faltaron peces que se hicieron de rogar, fue una experiencia de la que saqué partido. Una de las estrategias aplicadas, fue crear un cebadero de boilies central con semillas un poco duras, en torno a éste y de forma más amplia, otro cebadero que rodeaba al anterior de pellets de distintos tiempos de disolución que produjesen un manto de atracción con el que se enzarzasen los cangrejos. Era una estrategia inteligente en la teoría, pero ineficaz en la práctica como pudimos comprobar más tarde. Recuerdo que lanzábamos las cañas cuando sabíamos que nuestros aparejos descansaban vacíos en el fondo, algo a lo que terminamos ajustándonos con precisión, pues los cebos no duraban más de tres  horas bajo las aguas. Finalmente y sobre las cuatro de la mañana, desistíamos por el cansancio, levantándonos por la mañana junto a nuestros aparejos vacíos y listos para recebar la zona con abundancia y sin ninguna lógica.

Una de las tácticas empleadas desde hace años, es el uso de boilies duros, un hecho que nos permite mantener el cebo en el agua un poco más de tiempo. Simplemente deberemos dejar secar más de la cuenta nuestros boilies para que se endurezcan y taladrarlos con delicadeza antes de insertarlos en el hair. Esta es otra posibilidad que a mi parecer carece de eficacia ya que solo la tiene en parte, sin olvidar la ventaja positiva de que estamos presentando lo que queremos, un boilie de verdad.


Otra opción muy utilizada, es el uso de boilies gigantes y endurecidos, boilies de 30mm con un grado de dureza óptimo que le proporcionarán un ventajoso tiempo a nuestros cebos bajo el agua, pensados concretamente para cangrejos y galápagos. Pero seguiremos teniendo que reemplazar nuestros aparejos cada determinado tiempo de forma obligada, aunque estos nos aporten más horas de pesca continua.

Sí, es cierto que podríamos utilizar pop-up y elevarlos un palmo y medio sobre el fondo para evitar a estos crustáceos, pero en mi opinión y dejando a un lado el hecho de que “debe existir algún tipo de cangrejo trepador” por mis experiencias, se trata de buscar una presentación por parte del cebo, resistente, eficaz y natural en la medida de lo posible.

-Soluciones radicales:
¿Qué sucede cuando la población de cangrejos es desmesurada y ni chufas, boilies duros, gigantes y mucho menos semillas sobreviven en el fondo acuático?
Las marcas ofrecen  jaulas de plástico en donde poder encarcelar a nuestros cebos. Esto es otra opción y muy eficaz, pero creo que deja mucho que desear para acercarse a la realidad y la atracción. Es un artilugio que lleva en el mercado bastantes años y podría ser una solución extrema, para una situación extrema.

Como podréis apreciar, el mercado no se cansa de ofrecernos comodidad y de quitarme en parte y de forma particular, el privilegio y la satisfacción de investigar y buscar soluciones nuevas para estos soldados de agua dulce. En esta ocasión se trata de un remedio en forma de tubo termo retráctil de grandes dimensiones, y digo grandes dimensiones porque está hecho para introducir el boilie en su interior y reducir el tamaño del tubo mediante calor, ajustándose a la forma del boilie y creando una capa protectora resistente en todo su perímetro. El siguiente paso y a gusto del pescador, será ir cortando trocitos de su perímetro para dejarlo a modo de “balón de futbol”, para así poder emitir los aromas por esas aperturas. Esta es otra solución que presenta por un lado naturalidad y por otro eficacia.

-Rozando la realidad:

Llegamos a mi momento favorito, se trata de unas imitaciones de boilies y semillas que personalmente pienso que  rozan la realidad. Los boilies de goma, están fabricados con materiales porosos que absorberán el “dip” que deseemos. Presentan un material gomoso a prueba de balas para los cangrejos y he comprobado como pueden durar emitiendo aroma, más de un día y medio. No estaría diciendo esto si no me hubiesen dado resultado y es que, en innumerables ocasiones he presentado un snowman compuesto por un boilie natural y otro de los citados, recibiendo a la mañana siguiente una picada que ha sido capturada por el único boilie que seguía ejerciendo su función, y son estos. Otra opción es el uso de granos de maíz de la misma composición, o mejor aún, imitaciones de chufas que vienen provistas de su remojo concentrado de chufa. Hasta el momento, ningún cangrejo ha osado ganar a tan fiel imitación de cebo y aunque estoy seguro de que alguna picada se pierde por ser al fin y al cabo un cebo artificial, cubre con holgura mis necesidades básicas de pesca en escenarios normales o extremos de cangrejo.
Otras marcas, nos dan la posibilidad de utilizar los “boilies Perma Pops”, unas imitaciones fieles con cualidades flotantes. Estos cebos vienen provistos de una pequeña tapa en su parte superficial, donde podremos introducir en el interior del cebo masilla de tungsteno para hacerlos fondantes. Concretamente puedo decir que probé hace tiempo unos de cangrejo, con buenos resultados y una larga durabilidad en su función al desprender aroma.

Espero que con este artículo, a más de un pescador se le abran las puertas de lo desconocido y le permita probar cosas nuevas y lo más importante, conseguir sus resultados superando dificultades. Por el momento, seguiré probando las nuevas fundas para boilies que han salido al mercado, algo parecido a las fundas que poseen los auriculares de los aparatos de música, un material triunfador al absorber nuestros remojos y que repele por su textura a las pinzas de estos legionarios nocturnos.
Y recordar…no podemos vivir con ellos, pero sin ellos tampoco. Al fin y al cabo, yo les daría las gracias.



Artículo realizado por: Eduardo Zancada

THE SOURCE "LA PRUEBA DE FUEGO"

 El mes de junio llagaba a su fin y antes de que entrase la primera gran racha de calor, decidí tomarme unos días libres en el trabajo. Tenía pensado hacer alguna sesión rápida de pesca, pero desafortunadamente el tiempo estuvo un poco revuelto con bajas presiones días antes a mi sesión. Mientras esperaba a que mejorara el tiempo, decidí emplear una tarde para hacer unos boilies caseros con uno de mis mix favoritos, que tan buenos resultados me ha dado a lo largo de muchas jornadas de carpfishing.
Saque del armario el bote de 10 kg de Base Mix de Source de Dynamite  Bait, un par de docenas de huevos, 1,5kg de birdfood, un poco de Dip de Source para potenciar el sabor, la tabla de rular boilies y pistola en mano como si de un vaquero se tratara, me puse manos a la obra elaborando un total de 8 kg de boilies de Source, caseros, jugosos y con aroma extra.
Pasados unos días cuando el tiempo empezó a mejorar y con los boilies listos para la pescar después del proceso de secado, decidí  que era el momento de dirigirme al puesto de pesca que unos días antes había estudiado a la perfección.
Al llegar no había nadie, el pantano estaba solitario, corría una leve brisa que venía de frente,  algunas carpas se veían  moviéndose  por la zona con cierta actividad. Saque entonces del coche mi equipo de carpfishing y extraje la bolsa que contenía los boilies que había hecho hacia unos días, emitían  un olor intenso, muy parecido al de los boilies comerciales, saque el cobra y opté por cebar en los dos sitios donde había decidido poner mis montajes.

El cebado lo realicé concentrado, compuesto por pequeñas partículas, algo de trigo, cañamón, maíz y comida de pájaros a los que le añadiría pellet de Source de 8 y 4 mm. Las cañas estaban montadas con pop-up de 14mm del mismo sabor, junto a uno de los boilies que había elaborado, la otra con un boilie de 18 mm recubierto con plástico termo reducible por si los cangrejos hacían acto de presencia, ya que en este embalse aparecen con regularidad, acompañado este de unos maíces de plástico que llevaban remojados varios días en Dip The Source, añadiéndoles una malla de stick mix del mismo sabor.

Una vez lanzadas las cañas y posados los montajes en el fondo, solo  me quedo esperar a la ansiada picada, sabiendo que esta no tardaría, pensando que en el fondo tenía un buen cebo.
Pasadas unas horas, una de mis bobinas empezó a girar violentamente, indicando la alarma una fuerte picada y terminando con una potente clavada por mi parte. La carpa estaba muy fuerte, ofreciendo mucha resistencia, no paraba de sacar sedal del carrete en dirección al centro del pantano. Forcé la carpa por segunda vez con mi caña Shimano Tecnium, haciéndola cambiar de dirección. Esta vez nadaba en paralelo a la orilla, a mi derecha se encontraba un muro de piedras que se hundía en el pantano y desafortunadamente era la dirección que había tomado ésta.
Bombeando con la caña  todo lo que yo podía, intenté sacar a la carpa de la zona de peligro, pero como todos los carpitas sabemos, cuando nos toca una cabezona que se obceca en meterse en un obstáculo no hay quien las pare. Sentí como el puente de trenzado que tenia puesto rozaba con las piedras del muro, aguantando los envistes de mi adversaria, poco a poco fue perdiendo fuerzas, algunas  carreras le siguieron, pero sin la potencia inicial de la lucha. Una vez orillada con la sacadera preparada, logre capturarla, se trataba de una preciosa común que deje descansar en la  moqueta, la desanzuelé viendo que había sucumbido al pop up y mi boilie casero de Source. Hice las fotos de rigor y me dispuse a devolverla a su medio como mandan los cánones del carpfishing.

Las siguientes horas prosiguieron con algunas capturas más, demostrándome que no me había equivocado a la hora de elegir mi cebo, es muy gratificante ver como uno captura peces con un cebo que se a elaborado uno mismo, pero reconozco que el merito está en los ingredientes de gran calidad que la casa Dynamite incorporó en este mix, un cebo ganador para una sesión ganadora.
 
 

Artículo realizado por: Miguel García

BOILIES "EL UNIVERSO DESCONOCIDO"

Boilies llamativos


Son las fechas adecuadas para preocuparnos por la atracción de nuestros cebos de anzuelo y por ello deberemos prestar una meticulosa atención a todos estos elementos.   -Los dips (remojos del mismo sabor que nuestro cebo) aumentarán el sabor y olor de nuestro boilie, pudiendo escoger entre remojos en base de alcohol, para una mejor disolución o elementos como los estimuladores de apetito que facilitan la digestión y la vuelta a ingerir nuestros cebos, por parte de las carpas.


-Las bolsas o mallas de pva, serán como dijimos en artículos anteriores, elementos indispensables, sustitutos de nuestras manos que dejarán un puñado de cebado junto a nuestro anzuelo. Particularmente hacemos siempre uso de estos materiales de pva, salvo cuando nos puedan dificultar la pesca, como en el caso de que haya un manto de algas cubriendo el fondo, donde entrarán en juego los boilies flotantes. En nuestras últimas sesiones hemos probado los pop-ups de pineapple banana de Dynamite Baits, de color amarillo-fluro, con un aroma a golosina inigualable y que nos han aportado excelentes resultados.

Rentabilidad económica

Es un dilema el uso de boilies de distinta calidad, algo que va unido a la economía de cada pescador, haciendo uso de boilies más o menos económicos y alegando que al fin y al cabo da lo mismo. Es un hecho con el que no estamos de acuerdo ya que suele ser en estas épocas, cuando un cebo de alta calidad marca la diferencia en número de picadas.
En otras fechas de alta actividad  de los peces, puede que funcionen cebos baratos con mucho aroma, pero tenemos constancia de que si no les ofrecemos algo de muy buena calidad que les aporte sus exigencias corporales en nutrientes, ese cebo carecerá de importancia la próxima vez. Por otro lado, una vez hayan tomado en un lugar determinado un cebo que les complete sus necesidades corporales, lo incluirán en su dieta de manera casi obligada.
 Los boilies  económicos de 3 euros el kilo podrán funcionar con los pequeños ejemplares al igual que un boilie de calidad de 15 euros, pero en la mayoría de los casos y hablando de viejos y recelosos ejemplares, la situación se complica, como en invierno, debiendo ser más meticulosos con lo que ofrecemos. Está claro, que si no se pesca en equipo, el gasto de un solo carpista para hacer cebaderos se dispara de una forma incontrolada, pudiendo gastar mensualmente hasta 400 euros en épocas de frenesí de las carpas, con el objetivo ilógico y en principio, de arrojarlo a las aguas para atraer a los peces. Es un hecho que solo los años de experiencia en esta modalidad, nos hará ver que merecerá la pena adquirir cebos de calidad, para terminar siendo recompensado con ejemplares de hasta 20kg.
En el mercado podemos encontrar boilies desde los 3,5 euros el kilo, hasta los 20euros y por regla general, un cebo con un precio intermedio sobre los 12euros, tendrá unos componentes aceptables para nuestros menesteres. Actualmente estamos probando las diversas gamas de Dynamite Baits que brindan una variedad tanto en gama de calidad como sabores para cubrir todos los escenarios de pesca. De esta forma, se puede destacar en primer lugar la gama de boilies “Carp Tec“ que nos ofrece una calidad media-alta, abalada por años de experiencia y éxitos en capturas, su precio intermedio nos permite utilizarlos sin rencor para la elaboración de cebaderos que nos garantizarán el éxito. Por otro lado nos encontramos con la gama HI-ATTRACT con un precio un poco mayor que se corresponde con una mejor calidad en su elaboración y nutrientes.

Esta última gama resulta la adecuada para utilizarla en nuestros hairs, (sin olvidar el previo remojo en el hook-bait del mismo sabor) y la elaboración exclusiva con boilies de  pequeños cebaderos en lugares con presión de pesca o situaciones de pesca invernal, en donde nuestros boilies de cebado serán contados uno por uno.




El rechazo final

Hace años, utilice de forma masiva los citados boilies económicos que ofrecen lugares como Decathlon, obteniendo en principio resultados positivos. Acudía dos veces por semana al escenario de pesca, recebando el lugar con grandes cantidades de boilies y algunas semillas.
Resultó que al mes de tener aquel cebadero de forma activa, los peces no mostraban tanta curiosidad por mis cebos y mucho menos necesidad. En los momentos de fotografiarme con las piezas, defecaban un líquido rojo, llegando a la conclusión de que se trataba de aquellos boilies de fresa con los que cebé.
Normalmente cuando tenemos un ejemplar en el saco de retención y lo sacamos para fotografiarlo y soltarlo, éste puede dejar restos de los alimentos que ha comido en las mallas de los sacos, apreciando así cual es su alimento natural o si ha comido en nuestro cebadero. Pero las carpas de aquella jornada de pesca, parecían tener un gran problema de vientre y llegué a la conclusión de que no les sentaban nada bien mis boilies económicos. No lo deduje por ver aquel líquido rojo, pero si cuando pude comprobar que dejaron de picar en las siguientes semanas por más cebo que lanzase al agua, abandonando finalmente la zona de mi cebadero. Por lo tanto, puedo tener la certeza y la desfachatez de decir que esos cebos son una auténtica chapuza, siendo un pecado el fabricarlos y ponerlos a la venta.


 Los carpistas tenemos como pilares fundamentales el captura y suelta y cuidado del pez, sin olvidar el respeto por el medio. Por ello se trata de algo ilógico y en contra de nuestra filosofía, el hecho de que nos vendan veneno para las carpas, sin duda alguna se trata de puro marketing empresarial y un auténtico desconocimiento de las necesidades de sus clientes, es decir, algo sin futuro.


-Anzuelo pequeño, pez grande:

Hay costumbre en muchos carpistas a utilizar como norma general, anzuelos grandes del  nº 2 o nº 1. Hará unos ocho años, me encontraba pescando carpas a mosca con una imitación de miga de pan, la verdad es que era increíble ver los rechazos que le hacían a la miga (como si de truchas se tratara) cuando estaba la imitación a 10cm de la boca de estas carpas entre los tres y cinco kilos. La imitación consistía en un anzuelo del nº 6 sobre el que había montado lana de cordero (un material que al absorber el agua se queda con forma esponjosa imitando muy bien a una miga de pan). Son varias las ocasiones en que me han afirmado que la carpa es miope o se caracteriza por una visión penosa, algo que no me cuadra muy bien con lo sucedido aquel día.
Si es cierto que la importancia del tamaño del anzuelo, juega un papel importante en la captura de grandes ejemplares, sobre todo cuando existe presión de pesca en el escenario. Acostumbro a que el tamaño del anzuelo esté en consonancia con el cebo, tanto si uso boilies, chufas o maíz y a ser posible, un poco por debajo del tamaño de estos.
 Hace tiempo, mientras pescaba con dos amigos: Jason Temlett  y Toño Crespo, pude comprobar donde estaba el límite de este asunto.

Llevábamos tres días de pesca y las picadas disminuyeron en número, debido a que ya habíamos capturado bastantes peces y estos empezaban a remolonear con los cebos. Las escasas picadas se convirtieron en toques y algún ligero movimiento en los tensores de línea. Fue entonces cuando Jason, gran conocedor de lagos ingleses presionados, se decidió montar un pequeño anzuelo del número seis, con un boilie de 24mm (algo desproporcional) y su primera frase mientras nos enseñaba el montaje fue “con esto entran las grandes en Inglaterra” y se echó a reír. Supongo que os imagináis lo que vino a continuación.
Al cabo de media hora, todas nuestras cañas estaban armadas con anzuelos del mismo número y los ejemplares se sucedieron hasta bien entrada la noche, pero lo verdaderamente sorprendente, era sacar del agua grandes ejemplares con ese pequeño anzuelo, sin desgarros ni algún tipo de problema, incluso funcionaban mejor que los del nº4. Igual, una de las claves reside en pescar fino, para engañar a un viejo ejemplar testarudo y sabio.

Artículo realizado por: Eduardo Zancada

jueves, 14 de julio de 2011

TEMPERATURAS EXTREMAS



La pesca de la carpa en invierno requiere tiempo, cebos de calidad y una buena preparación para afrontar situaciones adversas, por estos motivos decidimos redactar unas pautas a seguir en cuanto a estrategias de pesca, situación del carpista y un equipo adecuado para situaciones que alcanzan algunas veces los -10º.

Equipo extremo

Muchos pescadores de grandes carpas, guardan sus equipos en estas fechas crudas y difíciles para la pesca, quedando un porcentaje restante que sigue a pie de los embalses, sabiendo que son las mayores piezas las que se capturan en esta época. Se trata de un momento en el que la vida de la carpa se ralentiza en un alto grado, buscando en consecuencia el pescador, escasas picadas pero de grandes ejemplares.
Será un trabajo duro y gratificante a la vez, destinado para aquellos enfermos del carpfishing.
Pasar cinco días de pesca continuos en el mes de Enero o Febrero, no suele ser muy bien recibido por nuestros cuerpos, que terminan resintiéndose de las inclemencias del tiempo. Para sobrevivir a estas situaciones deberemos hacernos con equipos de ropa pensados para estas circunstancias, como ropa específica de carpfishing.
 El mercado nos ofrece pijamas térmicos, petos de forro polar interior, abrigos multi-ajustables con diversas capas protectoras para viento, agua y frío,  siendo materiales con los que podemos soportar estas crudas situaciones. Se trata de hacer una inversión para varios años y que agradeceremos en situaciones complicadas, pudiendo seguir pescando debido a nuestro confort.

Los sacos de dormir específicos de carpfishing, se diferencian en su anchura y grosor de uno normal de acampada (los llamados sacos de momia) pudiendo pasar noches al raso con temperaturas de -10º. No debemos olvidar al realizar estas locuras a la intemperie, la existencia de cobertores, se trata de fundas impermeables por su capa exterior y completadas internamente por forro polar. Estos cobertores serán los encargados de recibir la capa de escarcha invernal o una ligera lluvia que nos pueda sorprender.

Un truco que me recomendó un amigo, es el de la bolsita de agua caliente. Con ella podremos pasar la mayor parte de la noche en caliente, recibiendo los vapores de los pies a la cabeza. El único inconveniente que tiene, suele ser la humedad que nos deja, resintiéndose el cuerpo más tarde, pero merece la pena.

Para los más precavidos, están los refugios o bivvys. Se trata de tiendas de campaña destinadas para distintas estaciones del año, siendo los refugios para tiempo primaveral o veraniego y las bivvys para situaciones extremas. Lógicamente, el uso de una bivvys en invierno, nos aislará de las temperaturas externas, proporcionándonos protección y un amplio espacio interior.

Ubicación del carpista

O mejor dicho, ubicación de las carpas, ya que se trata de situarnos cerca de su apostadero invernal, en donde disfrutan del microclima y pasan la mayor parte del invierno. Nos vemos en la obligación de recordar lo primordial que es la seguridad, teniendo como primer objetivo situar nuestro campamento en zonas seguras, debido a las crecidas de los ríos en estas fechas o liberación de las aguas  de algunas represas. No será la primera vez que un carpista se ve sorprendido en mitad de la noche, por la crecida de un río, o que haya situado su puesto de pesca en una isla de determinado embalse. Estos detalles me traen el recuerdo de una sesión de pesca en Mequinenza, donde tuvimos que dormir con 15cm de agua bajo nuestras hamacas, pasando una noche incómoda y bastante intranquila, sin posibilidad de situarnos en un lugar seco.
Por estos y otros motivos, deberemos dar prioridad a nuestro confort y seguridad, dejando en lugar secundario la localización de los peces.

Una vez solucionado lo anterior, buscaremos zonas profundas que puedan ofrecer cobijo a las carpas. Las zonas de los ríos cercanas a represas, suelen tener mayor profundidad y acopio de alimento desplazado por la corriente, siendo zonas calientes para una pesca de éxito. Por otro lado, en grandes embalses de la geografía española, tendemos a buscar reculas profundas con piedras cercanas, lugares que les ofrecerán cobijo y el escaso alimento natural de estas fechas. Las zonas de los embalses, como puntales, pueden ayudarnos a introducir nuestros aparejos en lugares profundos donde quizás, puede que se encuentren las carpas. Lo mejor en estas fechas, es hacer uso de las sondas en una embarcación, mostrándonos las profundidades y lugares más querenciosos para situar nuestros aparejos. Si tuviese que ceñirme a unas profundidades de forma general, personalmente decidiría pescar entre los 9 y 15 metros de profundidad, aunque se trata de una regla que dependerá de una infinidad de factores y por tanto, nadie asegura que sea lo ideal, para todos los escenarios de pesca.

El cebado

Se trata de un tema que ha sido analizado ya en diversos artículos, pero que no deja de ser algo ambiguo que se encuentra en constante evolución, debido a la gran variedad de productos que existen para su elaboración. Teniendo en cuenta que los metabolismos de las carpas se ralentizan en esta época y lógicamente, sus necesidades de alimento, deberemos adaptar las cantidades y productos de nuestros cebaderos a las circunstancias.
Existen productos en el mercado que se adaptan a esa forma lenta de vida. Con esto, nos referimos a productos de rápida disolución y atracción en las aguas, ejerciendo su objetivo de manera rápida y eficaz. Los pellets de halibut de pequeño tamaño, podrán disolverse en pocas horas dejando un manto atractivo en nuestro cebadero, al contrario que sus hermanos de 20 o 30mm. Estos pellets podemos bañarlos en aceites, pero el efecto que le aportarán los aceites, será de retardo de disolución, algo que no queremos. Por este motivo existen aceites de base de alcohol, que se diluyen mejor en aguas de baja temperatura, dejando a nuestros pellets disolverse y enriqueciendo la zona de aromas atractivos. Podemos encontrar en el mercado otras variedades de pellets de rápida disolución, esto nos evitará problemas y nos acelerará el proceso.
La utilización de pequeñas semillas será una opción inteligente, siempre que se encuentren muy cocidas y blandas, para facilitar la digestión y el regreso de las carpas con la intención de seguir comiendo.
Los engodos, son sistemas de cebado muy utilizados en otras modalidades de pesca como la inglesa, con el objetivo de atraer a las pequeñas presas de forma rápida. Aprovecharemos la inactividad de las pequeñas piezas para poder incluir en nuestra agenda de cebado de carpfishing, potentes engodos  que se desharán al instante bajo las aguas.
Estos y otros productos de cebado para el invierno, nos permitirán atraer a las carpas y no saciarlas rápidamente, un factor a tener en cuenta para que más tarde, puedan tomar nuestros cebos sólidos, que deberán escasear a modo de “alimento deseado y escaso”, para terminar prendidas en nuestras líneas.
Como última cuestión a recordar en el tema de los cebaderos, suelo repetirme a mi mismo el hecho de que las carpas grandes, tienen que comer con frecuencia de forma obligada, algo que les exige su volumen. Este suele ser el factor principal que me hace regresar motivado al puesto, después de resultados negativos de pesca.

Artículo realizado por: Eduardo Zancada